Tratamiento de la tendinitis del pie
Un tendón es el cordón grueso y fibrosos que une el músculo al hueso. Los tendones permiten el movimiento de las articulaciones. Cuando el tendón se inflama, se denomina tendinitis. Hay varios tendones en el pie que pueden inflamarse. Entre estos están el tendón de Aquiles, el tendón tibial anterior, el tendón tibial posterior y los tendones peroneos.
El tratamiento puede depender de la ubicación del tendón y de cuán lesionado esté. La primera preocupación de su proveedor de atención médica es reducir los síntomas y prevenir que se siga lesionando. El autocuidado de la tendinitis puede incluir el uso de hielo, medicamentos, descanso y limitación de la actividad para controlar el dolor y la inflamación. Siga todas las instrucciones que le dé su proveedor de atención médica. Volver a hacer actividad demasiado pronto puede hacer que los síntomas regresen. Con la ayuda de su proveedor de atención médica, podrá controlarse la tendinitis.
Use hielo y calor
Las compresas de hielo o frías justo después de una lesión ayudan a prevenir la inflamación y reducen el dolor. Envuelva una compresa fría o una bolsa de cubos de hielo en un paño delgado o en una toalla. Nunca coloque el hielo directamente sobre la piel. Coloque el hielo sobre el área dolorida por 10 a 15 minutos. Repita la aplicación de hielo tres veces al día durante los primeros tres días. Si ha tenido el problema durante 3 o más días, el calor puede ser de ayuda. Aplíquese una almohadilla de calor o toallas calientes durante 20 a 30 minutos, 2 o 3 veces al día o según le indique el proveedor de atención médica.
Tome los medicamentos
Su proveedor de atención médica probablemente le diga que tome ibuprofeno u otro antiinflamatorio. Estos reducen el dolor y la hinchazón. Tómelos siguiendo las instrucciones del proveedor. No espere hasta sentir dolor. En los casos más graves, se puede inyectar cortisona para aliviar el dolor.
Descanse y limite las actividades
Primero, descanse para reducir el dolor. El reposo también permite que los tejidos del pie cicatricen. Evite estar de pie durante los primeros días a semanas. Luego, vuelva lentamente a la actividad.
Después de su período de reposo, es posible que su proveedor de atención médica le dé unos ejercicios para hacer. Estos son para estirar y fortalecer. Haga las visitas de seguimiento con su proveedor de atención médica para saber si necesita más tratamiento. Si hace actividades de alto impacto, como correr o ejercicio aeróbico, pruebe otras actividades que impliquen menos esfuerzo para el pie. Andar en bicicleta y nadar son buenas opciones.
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